Inocuidad e Inteligencia Emocional

Inocuidad alimentaria e inteligencia emocional

 


Un colega auditor compartió alguna vez un comentario sincero que le hizo un cliente: "Puede que seas un auditor de inocuidad alimentaria, pero lo que realmente eres es un policía de inocuidad alimentaria".  

Curiosamente, no era la primera vez que escuchamos algo así. De hecho, a algunos nos han dicho esto alguna vez, como parte de nuestra experiencia de trabajo. Nos hace pensar y preguntarnos si los auditores en otras industrias han experimentado también lo mismo. Después de haber pasado de ser un auditor de inocuidad alimentaria a un consultor de cultura organizacional, una cosa está clara: el título profesional de uno define la autoridad profesional y no su identidad personal. Sin embargo, en la práctica, seguimos lo contrario: permitimos que nuestro título se convierta en nuestra identidad y, a veces, sobrepasamos nuestra autoridad cuando no se reconoce. Por ejemplo, pensemos en cómo se presentó la última vez a alguien o viceversa. ¿Puede ver el patrón?  

Los profesionales de la inocuidad alimentaria tienen la capacidad de impactar positivamente la cultura de la inocuidad alimentaria a través de la inteligencia emocional. La inteligencia emocional a menudo se confunde con la supresión de emociones. De hecho, es todo lo contrario. La inteligencia emocional es ser consciente de la emoción que estás sintiendo, comprender cómo te está afectando y ser consciente de cómo esa emoción está afectando a los que te rodean. Teniendo en cuenta que el cerebro humano está programado para estar a la defensiva, es más fácil ser reactivo que reflexivo.  

A continuación algunas formas en que los profesionales de la inocuidad alimentaria pueden practicar la inteligencia emocional, especialmente en la era de la pandemia.

 

Reúnase con su equipo técnico

 

Si su organización cuenta actualmente con la certificación HACCP (o un estándar similar), entonces está familiarizado con la importancia de las reuniones de seguimiento del equipo. Como líder del equipo, es posible que esté trabajando en un equipo multidisciplinario en el que no le informan. Sin embargo, aún está en la capacidad de mantener las relaciones humanas, co-crear un entorno inclusivo y ayudar a los miembros de su equipo a sentirse valorados. 

Algo que animo a que los equipos HACCP practiquen es el liderazgo de relevos, donde los miembros del equipo se turnan para dirigir la reunión del equipo HACCP mientras practican el tema subyacente: consultar con los miembros de su equipo.

 

Alinee su inteligencia emocional con sus valores

 

Es posible cumplir con las normas y ser ético, si así lo desea. Imagínese ser un supervisor de planta capaz de motivar un resultado final para aumentar la producción de la instalación comprometiendo su salud y bienestar (por ejemplo, empujándolos a trabajar horas extras). Su capacidad para practicar la inteligencia emocional se correlaciona con lo que valoras. Si bien hay líderes "con buenas intenciones" que intentan inspirar y motivar a sus equipos, es importante para ellos mantener la ética a la vanguardia de la forma en que toman las decisiones diarias.

 

Implemente una política de puertas abiertas

 

Una de las mejores cosas de ser un líder de equipo de HACCP es la capacidad de comprender cómo otros departamentos trabajan juntos y qué fuerzas impulsoras hacen que cambien sus prioridades. 

Cuando se es el líder del equipo en funciones para una operación de fabricación, se  obtiene una mayor visibilidad sobre por qué las necesidades de capacitación compiten con las necesidades operativas. El equipo de recursos humanos tendrá a menudo dificultades para lograr que los gerentes de planta se comprometan con las fecha de capacitación, y los gerentes de planta tendrán dificultades para obtener opciones de capacitación flexibles por parte de recursos humanos. Ser el líder del equipo significa reconocer cómo se sienten ambas partes y ayudarlos a darse cuenta de que comparten un objetivo común. 

La confianza es el pegamento que nos une a todos, profesional y personalmente, mantener una política de puertas abiertas significa que usted es accesible para su equipo y que está listo para escucharlos. Mientras más personas se sientan cómodas comunicándose con usted, mejor podrá ver el panorama general.

 

Practicar el cuidado personal

 

He aquí un ejercicio divertido (y revelador). Pida a los miembros de su equipo que enumeren las cinco cosas que más valoran en sus vidas. Si bien la mayoría de ellos pueden enumerar a sus cónyuges, hijos, parejas, mascotas o automóviles, muy raramente las personas se enumeran a sí mismos. Ya sea que sea un miembro o un líder del equipo de inocuidad alimentaria, su tiempo y energía son recursos finitos. Para practicar la inteligencia emocional, primero debe practicar el cuidado personal. Sin navegar por sus propias emociones, sin comprender cuáles son sus factores desencadenantes y qué acciones puede tomar para estar completamente presente para su equipo (y su familia), es difícil ser emocionalmente inteligente. 

Nos demos cuenta o no, la inteligencia emocional juega un papel importante cuando se trata de investigaciones de fraude alimentario, retiros de productos, trazabilidad, inspecciones de inocuidad alimentaria y capacitación de profesionales. Tómese un momento para pensar en las formas en que podemos hacer que la inocuidad de los alimentos se base en valores y objetivos a través de la inteligencia emocional. 

 

Traducido y adaptado de: Sebastian, J. (January, 2021). The Emotionally Intelligent Food Safety Professional. Food Quality and Safety Magazine. USA.

 

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